sábado, 28 de septiembre de 2019

Cultura Otomí - Resumen

Cultura Otomí
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Los otomí son uno de los pueblos indígenas de México , también conocidos como Ñahñú o HNA hñü , pero es una designación ancha del grupo de pueblos de habla otopame , complejo otomí.Como ocurre con la mayor parte de los Etnónimos empleados para referirse a los pueblos indígenas de México, el término otomí no es nativo del pueblo al que hace referencia. Otomí es un término de origen náhuatl que deriva de otómitl , [2]palabra que en la lengua de los antiguos mexicas significa que camina con flechas[3] aunque autores como Wigberto Jiménez Moreno lo hayan traducido como flechador de pájaros .

Localización 
Ocupaban el valle de Toluca , nombre dado por los nahuas a los pueblos sedentarios que ocupaban Hidalgo , Guanajuato , Estado de México y Querétaro , con bolsas en San Luis Potosí , Puebla y Tlaxcala . Actualmente habitan un territorio fragmentado que va del norte de Guanajuato al sureste de Tlaxcala . Sin embargo, la mayor parte de ellos se concentra en los estados de Hidalgo , México y Querétaro .

Demografía 
Según Asher, eran 432.000 en 1980. Según la Enciclopedia Británica, en 1997 eran 400.000 individuos monolíngües. Según el censo mexicano del 2000 eran 646.875 individuos, de los cuales el 50,6% todavía hablaba la lengua amerindia. Entre las diversas variedades de hablas otomí podemos destacar:
·         Este , a las vecindades de Huehuetla y San Bartolo (Hidalgo), Tlachichilco y Ixhuatlán (Veracruz). Entre 17.500 y 20.000 hablantes en 1982.
·         Mezquital , en el valle de Mezquital ( Hidalgo ). Entre 80.000 y 100.000 hablantes, incluidos 100 en Carolina del Norte (EE.UU.).
·         Noroeste , en los estados de Querétaro , Guanajuato , Hidalgo y México. Entre 30.000 y 40.000 hablantes.
·         Sudeste , en Tlaxcala. De 1.000 a 1.500 hablantes en 1977. ^
·         Estado de México , en el estado de México, 7.000 hablantes en 1982.
·         Temoaya, 35.000 hablantes en 1991.
·         Tenango , en San Nicolás (Hidalgo) y Puebla . De 8.000 a 10.000 hablantes.
·         Texcatepec , al NE de Veracruz . De 6.000 a 8.000 hablantes en 1977.
·         Tilapa , ciudad entre México, DF y Toluca (México).

Costumbres 
Se parecen a los nahua en casi todo salvo el idioma, ya que vivían muy cerca unos de otros, y todos ellos se decían descendientes de los toltecas ; pero los nahua los despreciaban y rechazaban como próximos, como lo muestra el Códice Florentino .Tenían fuertes lazos con los tepaneca , gobernantes imperiales con base en la ciudad de Azcapotzalco, que fueron vencidos por los mexicanos y acolhua el 1430. También los que menos los esperaban, como bárbaros y salvajes, sobre todo después de la penetración chichimeca . Pero, los respetaban como guerreros, ya que ambas culturas tenían títulos militares de alta graduación.

Historia 
Los textos historiográficos sobre los pueblos mesoamericanos de la época prehispánica han prestado muy poca atención a la historia de los otomís. Muchos siglos atrás, en el territorio que ocupaban los otomís la llegada de los españoles florecieron grandes ciudades como Cuicuilco , Teotihuacan y Tula . Incluso, en la Triple Alianza que dominaba el llamado "Imperio azteca ", Tlacopan heredó los dominios de Azcapotzalco , con mayoría de población otomí. Sin embargo, casi nunca se mencionan los otomíes como protagonistas de la historia mesoamericana prehispánica, quizá porque la complejidad étnica del centro de México en esa época no permite distinguir las contribuciones de los antiguos otomís de aquellas producidas por sus vecinos. [4] Sólo hasta años recientes empieza a aparecer algún interés sobre el papel que jugó este pueblo en el desarrollo de las altas culturas del Altiplanicie Mexicana, desde el Período Preclásico hasta la Conquista .


Los pueblos otomís en la época prehispánica 

Es muy posible que los ancestros de los otomís hayan ocupado el centro de México desde hace al menos cinco milenios, por lo que habrían participado en el florecimiento de las primeras urbes mesoamericanas. 

Hacia el quinto milenio antes de la era cristiana, los pueblos de habla en lenguas otomangues formaban una gran unidad. La diversificación de las lenguas y su expansión geográfica a partir de lo que se ha propuesto como su urheimat , [5] es decir, el valle de Tehuacán (actualmente en Puebla ) [6] debió ocurrir después de la domesticación de la trinidad agrícola mesoamericana, compuesta por maíz , frijol y chile .Esto se establece con base en la gran cantidad de cognados que existen en las lenguas lenguas otomangues en el repertorio de palabras alusivas a la agricultura. Tras el desarrollo de una incipiente agricultura, el proto-lenguas otomangues dio origen a dos lenguas diferenciadas que constituyen los antecedentes de los actuales grupos oriental y occidental de la familia lenguas otomangues. Siguiendo con la evidencia lingüística, parece probable que los otopames -miembros de la rama occidental- hayan llegado a la Cuenca de México alrededor del cuarto milenio antes de la era cristiana y que, en contra de lo que sostienen algunos autores, no hayan migrado del norte sino del sur. [7]
En este sentido, es plausible que durante mucho tiempo la población del centro de México haya formado parte de la familia de pueblos hablantes de lenguas lenguas otomangues. A partir del Preclásico (ss. XXV aC - I dC), el grupo lingüístico otopame se empezó a fragmentar cada vez más, de tal manera que hacia el Periodo Clásico el otomí y el mazahua ya eran lenguas diferentes. Si las cadenas lingüísticas del grupo otopame se encuentran concentradas y más o menos intactos [8] en el centro de México, es posible que los grupos lenguas otomangues hayan ocupado sus actuales territorios étnicos desde hace mucho tiempo, lo que llevaría a revaluar su participación en el surgimiento de poblaciones como Cuicuilco , Ticomán , Tlatilco , Tlapacoya y otros durante el Período Preclásico; pero especialmente en el desarrollo de la gran ciudad de Teotihuacan . Aunque varios autores coinciden en que la población del Valle de México durante el esplendor de Teotihuacan era principalmente otomí, se resisten a aceptar que también los gobernantes de la metrópoli pudieron formar parte del mismo grupo lingüístico. [7]
La caída de Teotihuacan es un hito que señala el fin del Clásico en Mesoamérica. Los cambios en las redes políticas a nivel mesoamericano, las disputas entre los pequeños estados rivales y los movimientos de población derivados por las prolongadas sequías en el norte de Mesoamérica facilitaron la llegada de nuevos pobladores en el centro de México.Por esta época tiene lugar la llegada de grandes grupos de habla náhuatl que empezaron a desplazar a los otomís hacia el oriente. Estos llegaron entonces a la Sierra Madre Oriental y en algunas zonas del valle de Puebla-Tlaxcala . En los siglos siguientes, el territorio otomí se desarrollaron grandes estados encabezados por los pueblos nahua. Alrededor del siglo IX , los toltecas convirtieron en Tula ( Mähñem'ì en otomí) en una de las principales ciudades de Mesoamérica. Esta ciudad concentró una buena parte de la población del valle del Mezquital, de filiación otomí; aunque muchos de ellos siguieron refugiándose en el sur y al oriente, en el estado de México y la Sierra Mafre Oriental. [9]
El esplendor del estado tepaneca de Azcapotzalco en la cuenca lacustre del valle de México llevó a este pueblo a expandirse hacia el occidente, ocupando el territorio que tradicionalmente había sido ocupado por los pueblos otomí, mazahua, matlatzinca y atzinca .De este modo, los pueblos otomís cayeron en la órbita de poder de los nahuas que habían ocupado la cuenca de México. Tras la derrota de Azcapotzalco ante la alianza de México-Tenochtitlan y Texcoco, los dominios de los tepaneques en el poniente del actual estado de México fueron asignados a Tlacopan . El territorio de los otomís se encontraba precisamente en la zona donde confluían los dominios de los mexicas y sus aliados en el oriente y de lostarascos de Michoacán al ponente. Cuando los españoles llegaron al centro de México, esta zona era habitada por diversos grupos étnicos que con frecuencia se mezclaban para formar una localidad. Es por eso que los cronistas de Indias reportaron que a Tlacopan se hablaba otomí, náhuatl, chocho, matlatzinca y mazahua. Wright Carr señala que:
«
Lejos de ser un pueblo dominado, los otomís formaban parte esencial del panorama político, militar, económico y social del Centro de México. [10]
»
Conquista 
Los otomís entraron en la historia de la Conquista de México cuando los españoles llegaron a la región dominada por los tlaxcalteca . Los otomís llegaron a la región de Puebla-Tlaxcala durante el periodo Postclásico Temprano, cuando su territorio original fue invadido por los nahua procedentes del occidente y el norte de Mesoamérica. [11] 
En la región del valle de Tlaxcala convivieron con los señoríos de la llamada " República de Tlaxcala ", una confederación dominada por tribus nahuas y opuesta a los mexicas y sus aliados. Los tlaxcaltecas eran aliados militares de los otomíe de Tecoac , a quienes se reconocía como un pueblo con grandes habilidades para la guerra. De acuerdo con el Códice Florentino los otomís fueron atacados por los españoles:
«
Y cuando a Tecoac llegaron, fue en tierra de tlaxcaltecas, donde estaban poblando sus otomís. Pues estos otomís les salieron al encuentro en son de guerra; con escudos les dieron la bienvenida.
Pero los otomís de Tecoac muy bien los arruinaron, totalmente los vencieron.Los dividieron en bandas, hubo división de grupos. Los canonejarrn, los asediaron con la espada, los flechas con sus arcos. Y no unos pocos solos, sino todos perecieron.
Y cuando Tecoac fue derrotado, los tlaxcaltecas lo sintieron, lo supieron: se les dijo. Mucho se amedrentaron, sintieron ansias de muerte. Los sobrevino gran miedo, y de temor se llenaron. [12]
»
De acuerdo con la versión de los informantes de Sahagún , al ver la ruina de los otomís de Tecoac los tlaxcaltecas decidieron aliarse con los españoles.
De hecho los otomíes jugaron un papel muy destacado pero poco reconocido en la Conquista de México. Tras la derrota del ejército de Cortés en el episodio de la Noche Triste, los otomís del pueblo de Teocalhueyacan visitaron Cortés un día después por el rumbo de Naucalpan . En este encuentro, los españoles recibieron comida y una promesa de alianza y refugio en la zona de Teocalhueyacan. Los españoles visitaron este poblado y permanecieron cerca de diez días, recomponiendo fuerzas militares y alianzas de carácter político. A instancias de este grupo de otomís, Cortés atacó por sorpresa y masacró a los nahua de Calacoaya el 2 de julio de 1520 , aliados de la Triple Alianza y enemigos de los otomís. Esta fue la segunda acción militar de los españoles en el Valle de México , esta vez exitosa y contando con la complicidad de los otomís de Teocalhueyacan. Tras recomponerse, los españoles partieron rumbo al territorio aliado de Tlaxcala; pero en el camino se enfrentaron nuevamente con los mexicas en la Batalla de Otumba . En esta ocasión salieron triunfantes y para ello tuvieron que explicar muy probablemente con la ayuda de los otomís, tanto de Tlaxcala como de Teocalhueyacan.

Época colonial 

Los otomís fueron cristianizados en los años siguientes a la Conquista de Tenochtitlán. Las primeras tareas de evangelización fueron a cargo de los franciscanos , concentrados en las provincias de Mandenxhí ( Xilotepec ) y Mäñhemí ( Tula ), donde realizaron su labor entre los años  de 1.530 a 1,541 .En 1548 la orden de los agustinos aprobó la creación de los conventos de Atocpan y Ixmiquilpan . El convento de Ixmiquilpan destaca porque sus murales (realizados en la segunda mitad del siglo XVI) presentan un tema netamente indígena (el de la guerra sagrada ) en un panorama de elementos relacionados con la mitología cristiana. [13] Con la cristianización de los otomís inicia también el proceso de adaptación de las formas de organización política europeas, que dieron origen a la organización de las comunidades indígenas en mayordomía , que, en casos como el de los otomís de 'Ixtenco (Tlaxcala) constituyen uno de los pocos elementos de identidad étnica que aún conservan. De manera paralela a este proceso de aculturación , en otras partes del centro de México el franciscano Bernardino de Sahagún hacía indagaciones entre los pueblos nahua. Los informantes de Sahagún expusieron la manera en que los nahua veían a los otomís antes de la llegada de los españoles, de los que dijeron "no carecían de policía, vivían en poblado; tenían su república". [14]
Los frailes franciscanos levantaron un gran convento, el de Corpus Christi en Tlalnepantla en1550 y en una de sus puertas laterales llamada Porciúncula se lee que fue construido por igual por los pueblos locales nahua y otomís ahora cristianizados y sometidos por igual a la corona española. Este convento fue edificado en un lugar que quedaba a medio camino entre los dos grandes poblados de Tenayuca (mexica) y Teocalhueyacan (otomí). El teocalli de Tenayuca sobrevive hasta nuestros días; pero el de Teocalhueyacan no. Dado que se sabe que las piedras aportadas para la construcción por los otomís eran de color gris, es posible que estas sean justamente las piedras del desaparecido teocalli de Teocalhueyacan, paradójicamente los de Teocalhueyacan fueron unos de los primeros aliados de Cortés en el Valle de México .
Durante la Colonia, los frailes hicieron una gran labor de investigación sobre las culturas y las lenguas indígenas. Sin embargo, en comparación con el caso de los pueblos de habla náhuatl, los documentos producidos sobre los otomís son realmente pocos. Luis de Neve y Molina publicó en 1797 unas Reglas de orthographia, diccionario, y arte del idioma othomí , que fueron redescubiertas en 1989. Este documento se suma a otros manuscritos que fueron producidos con antelación en el centro de México. Quizá el más conocido de ellos sea el Códice de Huamantla , que fue realizado en la región de Tlaxcala en el siglo XVI y habla sobre la historia de los otomís desde la época prehispánica hasta la Conquista. Otro documento de igual importancia es el Códice de Huichapan , procedente del valle del Mezquital y realizado por el otomí Juan de San Francisco a finales del siglo XVI . [15]
La llegada de los españoles a Mesoamérica significó el sometimiento de los pueblos indígenas al dominio de los recién llegados. Hacia la década de 1530, todas las comunidades otomís de la Valle del Mezquital y la Barranca de Meztitlán habían sido repartidas en encomiendas . Posteriormente, al modificarse la legislación española, aparecieron las llamadas repúblicas de indios , sistemas de organización política que permitieron cierta autonomía de las comunidades otomís con respecto a las poblaciones hispano-mestizas. La creación de estas repúblicas de indios, el fortalecimiento de los cabildos indígenas y el reconocimiento de la posesión de las tierras comunales por parte del Estado español fueron elementos que permitieron a los otomís conservar su lengua y, hasta cierto punto, su cultura indígena. Sin embargo, especialmente en cuanto a la posesión de la tierra, las comunidades indígenas sufrieron despojos a lo largo de los tres siglos de colonización española. [16]
Al mismo tiempo que los españoles iban ocupando los antiguos asentamientos otomís -como es el caso de la actual ciudad de Salamanca ( Guanajuato ), fundada en el asentamiento otomí de Xidóo ( "Lugar de Tepetates") 1603 por decreto de Gaspar de Zúñiga y Acevedo , virrey de Nueva España [17] -, algunas familias otomís fueron obligadas a acompañar a los españoles en la conquista de los territorios al norte de Mesoamérica, ocupados por los belicosos pueblos aridoamericans. Fueron colonizadores los otomís que se asentaron en ciudades como San Miguel el Grande y otras ciudades de El Bajo . De hecho, el proceso de colonización de este territorio fue esencialmente obra de los otomís, teniendo como punta de lanza el señorío de Xilotepec . En El Bajo los otomís sirvieron como puente para la sedentarización y cristianización de los pueblos nómadas, que terminaron siendo asimilados o exterminados por la fuerza. La importancia del Bajo en la economía de la Nueva España le convirtió en un escenario donde confluyeron posteriormente diferentes grupos étnicos, incluidos los migrantes tlaxcalteca, los purépecha y los españoles, que finalmente acabarían por sobreponerse a todos los grupos indígenas que los apoyaron en la conquista de este territorio que había sido el hábitat de numerosos pueblos clasificados como Chichimecas .Sin embargo, hasta el siglo XIX, la población otomí en El Bajo era todavía un componente principal, y algunos de sus descendientes permanecen en municipios como Tierra Blanca,San José Iturbide y San Miguel de Allende . [18] Los movimientos de la población otomí continuaron a lo largo de toda la época colonial. Por ejemplo, en San Luis Potosí , un total de 35 familias otomís fueron llevadas a la fuerza para ocupar la periferia de la ciudad y defenderla de los ataques de los indígenas nómadas de la región en 1711 . [19] Cabe señalar que los otomís no fueron los únicos indígenas migrantes en la época colonial. Los tlaxcalteca, aliados de los españoles, accedieron acompañarlos en su campaña hacia el norte. Los descendientes de la migración tlaxcalteca se encuentran en varios poblados de los estados fronterizos de México, como Bustamante ( Nuevo León ). En varios lugares, la población otomí fue diezmada no sólo por las migraciones forzadas o consentidas, sino por las constantes epidemias que sufrieron los indígenas mesoamericanos después de la Conquista. Numerosas comunidades fueron arrasadas entre los siglos XVI y XVIII a causa de las enfermedades. [20]
La sumisión al dominio español por parte de los otomís nunca fue total. Durante el siglo XVIIse sucedieron un gran número de conflictos originados por las diferencias entre españoles e indígenas. A Querétaro -la población otomí había sido asimilada o relegada de las tierras de mejor calidad para el empuje de la españolización del Bajo- hubo una rebelión en 1.735 en lacapital de la provincia originada por el escasez de granos para la población. Posteriormente, entre 1767 y 1785, los otomís de Tolimán se lanzaron contra las haciendas vecinas que habían despojado a la comunidad indígena de sus terrenos. La tensión originada por la reocupación de las tierras que los hacendados habían obtenido mediante la invasión de las tierras de las comunidades desembocó en un nuevo conflicto en la región de Tolimán en1806 . Para poner fin a la disputa, fue necesario que el Corregidor de Querétaro interviniera y pusiera en prisión a los líderes de la rebelión. Sin embargo, sólo dos años más tarde la violencia volvió a estallar a Tolimán, y los indígenas ocuparon nuevamente las tierras que habían sido despojados. [21]



Siglos XIX y XX

En general, los indígenas de México permanecieron indiferentes a laGuerra de Independencia , sin embargo, en el valle del Mezquital varios insurgentes lograron aliarse con los grupos otomís de la zona, que veían en la rebelión una manera de deshacerse del dominio de los criollos y peninsulares, quienes se habían apropiado de grandes extensiones de tierra en el valle y otras zonas del actual estado de Hidalgo donde los otomís estaban asentados. El cura rebelde Miguel Hidalgo y Costilla , se sublevó en 1810 hablando otomí los agricultores y indios, pero fue aplastado.
Eran otomís quienes apoyaron a Julián Villagrán y José Francisco Osorio , que controlaron el norte de la intendencia de México durante varios años al principio de la guerra. Al finalizar la guerra, el país se vio envuelto en una serie de rebeliones internas que también arrastraron a los pueblos indígenas. En 1849, con el fin de contribuir a la Guerra con los EE.UU. , el gobernador de Querétaro se apropió de las tierras de los indios muertos, lo que provocará la revuelta de los otomí, pame , jonaz y xiximeca . Armaron con cuchillos, y palos y atacaron el palacio de gobierno, pero sufrieron una fuerte represión. Entonces el jefe Eleuterio Quiroz se hizo fuerte en la Sierra Gorda y organizó partidas de guerrilleros que ocuparon Ciudad Fernández y Río Verde, pero fracasaron ante San Luis Potosí . Finalmente fueron derrotados por el hambre y por una amnistía decretada por el gobierno. Y con el fin de apaciguar los ánimos, instalaron en Sierra Gorda tres colonias militares y un grupo de misioneros, a la vez que hicieron un pequeño reparto de tierras.
Las reformas liberales de los gobiernos de Valentín Gómez Farías y Benito Juárez ocasionaron la pérdida de la personalidad jurídica que habían tenido las comunidades indígenas durante la Colonia. La aplicación de las leyes de desamortización de la tierra provocaron un conflicto agrario en el norte del estado de México -correspondiente en la actualidad en el territorio de Hidalgo- desde Huejutla hasta Meztitlán , protagonizado por las comunidades otomís y nahua que se vieron despojadas de sus tierras. [22]
El 2 de junio de 1990 fue detenido en México DF el activista otomí Manuel Martínez San Agustín, mariachi que no sabe español, sin orden judicial, seleccionado por la policía al azar para implicarlo en una investigación sobre un asesinato. Después de pasar cuatro días indocumentado y torturado, firmó una confesión en español y fue juzgado y condenado a 24 años de Prisión. Es considerado por Amnistía Internacional preso de conciencia .
Un caso más grave se dio de enero a marzo de 1994, cuando fueron detenidos los hermanos otomí Diego y Claudio Martínez Villanueva, sordomudos, analfabetos y retrasados ​​mentales, que fueron puestos bajo custodia acusados también de asesinato con una confesión de culpabilidad arrancada con torturas. Hasta marzo de 1995 no los soltaron definitivamente.

Referencias 
1.    ↑ Censo Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
2.    ↑ Gómez de Silva, 2001.
3.    ↑ Barrientos López, 2004: 6.
4.    ↑ Wright Carr, 2005: 28.
5.    ↑ * Urheimat es un término alemán que designa el lugar que se considera como el ámbito geográfico de origen de una protolengua .
6.    ↑ Campbell, 1997.
7.    ↑ Ir a:7,0 7,1 Wright Carr, 1996.
8.    ↑ Wright Carr, 2005: 26.
9.    ↑ Moreno Alcántara et al. , 2002: 7.
10. ↑ Wright Carr, 2005: 29.
11. ↑ Hay otras propuestas historiográficas que proponen que la ocupación otomí de la región de Tlaxcala podría haber tenido un origen más antiguo. Aunque no niega los movimientos migratorios de los otomís derivados de la llegada de los nahua en el centro de México, Sierra Puche (2005: 25) señala que los habitantes de Xochitécatl (ciudad que floreció en el Preclásico) pudieron ser otomís, basada en cuatro puntos: la presencia de numerosos hornos, el patrón de asentamiento que da preferencia a los lugares elevados, subsistencia apoyada en el forraje y la caza y las recurrentes representaciones femeninas de barro (Collin Harguindeguy, s / f: 169.)
12. ↑ León Portilla,: Cap. V.
13. ↑ Wright Carr, 2005: 43.
14. ↑ La descripción completa aparece en Sahagún, 2000: cap. XXIX.
15. ↑ Lastra, 2005: 33-37.
16. ↑ Moreno Alcántara et al. , 2002: 7-10.
17. ↑ Acosta Sol, s / f: 62.
18. ↑ Wright Carr, 1999.
19. ↑ Acosta Sol, s / f: 63.
20. ↑ Moreno Alcántara, 2002: 10.
21. ↑ CIESAS, s / f b
22. ↑ Moreno Alcántara, 2002: 12.

Bibliografía 
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·         Cajero, Mateo Velázquez (2009): Historia de los Otomíes en Ixtenco , San Juan Ixtenco, Tlaxcala, México. (segunda Edición)
·         Campbell, Lyle (1997): American Indian Languages: The Historical Linguistics of Native America , Oxford Studies in Anthropological Linguistics, 4, Oxford University Press, New York.
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·         Collin Harguindeguy, Laura (s / f): "Reflexiones sobre la identidad de los otomíes", en el sitio en internet de El Colegio de Tlaxcala,http://www.coltlax.edu.mx/pdf_dra_laura/reflexiones.pdf , consultada el 2 de noviembre de 2008.
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Bibliografia:


www.wikipedia.org
Enciclopedia Microsoft® Encarta® 2003.
Nueva Enciclopedia Tematica Grolier 2012
https://www.ecured.cu 


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